1. Introducción:
Cuando pensamos en investigación, vienen a nuestra mente espacios azulejados, guardapolvos blancos, microscopios, ratas. O complicadas cifras y estadísticas en una suerte de universo virtual. No pensamos que investigar puede implicar experiencias, emociones o sensaciones. Pero si, abarca todo eso y mucho más.
Investigar es una tarea cotidiana. Cada uno de nosotros tiene una cosmovisión o mirada personal del mundo y está permanentemente buscando evidencia que la confirme o la modifique. Nos hacemos preguntas y consideramos posibles respuestas, elaboramos hipótesis y tratamos de confirmarlas. O las refutamos y elaboramos otras. Todos estamos haciendo investigación todo el tiempo.
Lo mismo ocurre cuando recibimos a un nuevo consultante y comenzamos una nueva relación con él. Nos embarcamos en una investigación. Y aunque no formal, investigación al fin. Nos hacemos un montón de preguntas. ¿Qué le pasa a esta persona? ¿Cómo podría comprender su sufrimiento en términos teóricos?
Dada la naturaleza relacional del counseling, no es fácil explicar en qué consiste. Y ni hablar de describir lo que ocurre en el encuentro con un otro. Sin embargo, creo que vale la pena intentarlo. En un momento en que la profesión necesita expandirse y afirmarse en nuestra sociedad, es necesario que produzcamos evidencia válida que dé cuenta de nuestro trabajo.
2. ¿Qué es investigar?
Una definición: Es un proceso sistemático de cuestionamiento critico que conduce a proposiciones y conclusiones válidas que se comunican a los otros interesados. (McLeod, 2003.)
3. ¿Para qué investigar?
Para desarrollar el pensamiento crítico y la reflexión sobre la naturaleza y la finalidad de los procesos de ayuda que ofrece el Counseling.
Para ampliar nuestra visión: podemos aprender del trabajo de otros para mejorar nuestra práctica y podemos contribuir al pool de conocimientos y experiencias a nivel local e internacional.
Para obtener apoyo de distintas entidades nacionales e internacionales: serviría para conseguir apoyo de organizaciones o fondos público. De esta manera podríamos demostrar la eficacia del servicio que se ofrece a los consultantes. No convence que digamos que nuestro trabajo beneficia a los consultantes. Hace falta que podamos dar evidencia mas rigurosa.
Para confirmar o replantear la eficacia de la tarea. Se desarrollan nuevas ideas y abordajes todo el tiempo. Cada uno de nosotros trae a su profesión de nuestra propia impronta y muchas veces la experiencia acumulada de profesiones anteriores, y hace su propia integración de recursos. Por lo tanto, estamos innovando todo el tiempo. Sería tarea del investigador estudiar cómo funcionan estas innovaciones. Podríamos perderle el miedo a lo nuevo y nos animaríamos a ser nosotros mismos. La investigación confirmaría la eficacia o nos señalaría los aspectos a modificar.
Para estudiar la efectividad y relevancia en nuevos contextos. Siendo nuestra profesión aún tan joven sus campos de acción están explorados sólo en pequeña escala.
Para buscar respuestas a preguntas candentes que surgen de la práctica profesional sólo pueden ser contestadas llevando a cabo investigación.
Para hacer una contribución a la literatura y consolidar así la identidad de la profesión.
Consideramos que el counseling es una profesión dinámica. No es ni dogmática, ni fija, ni inmutable. Rogers dijo que cada uno deberá encontrar su manera de estar con el otro. ¿Cómo puedo saber de mi “estar”? ¿Beneficia al consultante? ¿De qué manera?
Muchos de nosotros queremos que nuestra carrera se convierta de terciaria en universitaria. Hoy en día el cuerpo de conocimiento de toda carrera universitaria está basado y nutrido por la investigación.
¿Qué otra finalidad te parece que puede tener la investigar en Counseling?
Cuando pensamos en investigación, vienen a nuestra mente espacios azulejados, guardapolvos blancos, microscopios, ratas. O complicadas cifras y estadísticas en una suerte de universo virtual. No pensamos que investigar puede implicar experiencias, emociones o sensaciones. Pero si, abarca todo eso y mucho más.
Investigar es una tarea cotidiana. Cada uno de nosotros tiene una cosmovisión o mirada personal del mundo y está permanentemente buscando evidencia que la confirme o la modifique. Nos hacemos preguntas y consideramos posibles respuestas, elaboramos hipótesis y tratamos de confirmarlas. O las refutamos y elaboramos otras. Todos estamos haciendo investigación todo el tiempo.
Lo mismo ocurre cuando recibimos a un nuevo consultante y comenzamos una nueva relación con él. Nos embarcamos en una investigación. Y aunque no formal, investigación al fin. Nos hacemos un montón de preguntas. ¿Qué le pasa a esta persona? ¿Cómo podría comprender su sufrimiento en términos teóricos?
Dada la naturaleza relacional del counseling, no es fácil explicar en qué consiste. Y ni hablar de describir lo que ocurre en el encuentro con un otro. Sin embargo, creo que vale la pena intentarlo. En un momento en que la profesión necesita expandirse y afirmarse en nuestra sociedad, es necesario que produzcamos evidencia válida que dé cuenta de nuestro trabajo.
2. ¿Qué es investigar?
Una definición: Es un proceso sistemático de cuestionamiento critico que conduce a proposiciones y conclusiones válidas que se comunican a los otros interesados. (McLeod, 2003.)
3. ¿Para qué investigar?
Para desarrollar el pensamiento crítico y la reflexión sobre la naturaleza y la finalidad de los procesos de ayuda que ofrece el Counseling.
Para ampliar nuestra visión: podemos aprender del trabajo de otros para mejorar nuestra práctica y podemos contribuir al pool de conocimientos y experiencias a nivel local e internacional.
Para obtener apoyo de distintas entidades nacionales e internacionales: serviría para conseguir apoyo de organizaciones o fondos público. De esta manera podríamos demostrar la eficacia del servicio que se ofrece a los consultantes. No convence que digamos que nuestro trabajo beneficia a los consultantes. Hace falta que podamos dar evidencia mas rigurosa.
Para confirmar o replantear la eficacia de la tarea. Se desarrollan nuevas ideas y abordajes todo el tiempo. Cada uno de nosotros trae a su profesión de nuestra propia impronta y muchas veces la experiencia acumulada de profesiones anteriores, y hace su propia integración de recursos. Por lo tanto, estamos innovando todo el tiempo. Sería tarea del investigador estudiar cómo funcionan estas innovaciones. Podríamos perderle el miedo a lo nuevo y nos animaríamos a ser nosotros mismos. La investigación confirmaría la eficacia o nos señalaría los aspectos a modificar.
Para estudiar la efectividad y relevancia en nuevos contextos. Siendo nuestra profesión aún tan joven sus campos de acción están explorados sólo en pequeña escala.
Para buscar respuestas a preguntas candentes que surgen de la práctica profesional sólo pueden ser contestadas llevando a cabo investigación.
Para hacer una contribución a la literatura y consolidar así la identidad de la profesión.
Consideramos que el counseling es una profesión dinámica. No es ni dogmática, ni fija, ni inmutable. Rogers dijo que cada uno deberá encontrar su manera de estar con el otro. ¿Cómo puedo saber de mi “estar”? ¿Beneficia al consultante? ¿De qué manera?
Muchos de nosotros queremos que nuestra carrera se convierta de terciaria en universitaria. Hoy en día el cuerpo de conocimiento de toda carrera universitaria está basado y nutrido por la investigación.
¿Qué otra finalidad te parece que puede tener la investigar en Counseling?